Santiago, su terapeuta, lo acompaña en actividades típicas: salen a la plaza, juegan con masa, pero sobre todo... se meten a la pileta.
Y de ahí viene el logro más grande de este mes: SANTI APRENDIÓ A NADAR. Y le encanta!
No estoy hablando de estilos ;) Santi bracea y patalea, se mantiene a flote y llega a donde quiere. Incluso con su cabeza sumergida totalmente en el agua.
Creo que es un excelente logro, FELICITACIONES ENANO!